Trastornos de conducta en las demencias

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Trastornos de conducta en las demencias

La agitación, las acciones y palabras repetitivas, las alucinaciones, los delirios y la deambulación son comportamientos comunes del trastorno de demencia

Psonríe Autor: Psonríe

La agitación, las acciones y palabras repetitivas, las alucinaciones, los delirios y la deambulación son comportamientos comunes del trastorno de demencia.

En la conducta de agitación el individuo puede presentar irritabilidad, agresión verbal, física, además de insomnio. Estas conductas pueden aparecer y desaparecer o no aparecer nunca a lo largo de la enfermedad. En general, la agitación se presenta cuando el paciente con demencia piensa que se le está afectando su autonomía.

Los individuos con demencia por lo general repiten una y otra vez una palabra, actividad, pregunta o afirmación, son conductas inofensivas pero pueden provocar estrés debido al aburrimiento, temor, ansiedad o factores ambientales.

Cuando se presenta el síntoma de alucinación, lo principal es consultar a un especialista, generalmente, este síntoma es tratado farmacológicamente cuando se detecta, para mantener un ambiente seguro y tranquilo del individuo.

Adicionalmente, es muy importante el apoyo emocional de su entorno familiar.  Las alucinaciones suelen presentarse a medida que la demencia avanza. Para los familiares es muy duro aceptar que su familiar inesperadamente se vuelve una persona celosa, suspicaz y acusadora de acuerdo a lo que piensa que para él es muy real que en realidad no son algo personal sino parte de la demencia.

Por otro lado, la deambulación es un síntoma que aparece durante la fase intermedia de la enfermedad. Este tipo de personas sienten mucha confusión llegando a desconocer su casa, piensa que todo lo que lo rodea en su presente no es real y buscan cumplir su responsabilidad del pasado. Otra causa de las alucinaciones es que estos pacientes se sienten asustados ante un hogar donde hay mucho ruido, personas extrañas o visitantes en su hogar o que la persona que lo cuida intenta hacerle daño, lo que le provoca querer escapar.

Otra causa es el nerviosismo, que le provoca ansiedad, algunas veces provocado por el efecto del consumo de algún medicamento, búsqueda de una persona, lugar o artículo que haya extraviado.

Los familiares con personas con demencia que presentan este tipo de síntomas deben adoptar las siguientes acciones:

  • Reducir el consumo de dulces y cafeína.
  • Reducir al máximo el ruido, desorden y la cantidad  de personas alrededor de la persona con demencia, que puedan afectar.
  • Establecer rutinas y ambientes estables, es decir, objetos ubicados siempre en el mismo sitio para dar la sensación de seguridad y hacer más fácil los recuerdos agradables.
  • Si la persona con demencia está agitada, puede calmarla a través de caricias, música tranquila, caminatas, lecturas, conversaciones con un tono de voz pausado, sin intentar razonar con esta persona.
  • Mantener objetos considerados peligrosos fuera de su alcance.
  • Estimular su independencia tanto como sea posible y su auto cuidado.
  • Realizar con ellos actividades como meriendas para ayudarlo a olvidar las causas que pudieron provocar un conflicto.
  • Crear ambientes de bienestar y seguridad con el contacto físico y comunicación verbal.
  • No le haga reproches por repetir acciones o preguntas.
  • No le comunique planes para evitar crearle confusión, espera hasta justo el momento antes de llevarlos a cabo.
  • Establecer horarios de comida de visitas visible para ellos para evitar la ansiedad e incertidumbre sobre hechos del futuro.
  • Los familiares o cuidadores deben aprender a interpretar las conductas de la persona con demencia pues cada una puede indicar una necesidad.
  • Si la persona está en un estado de confusión busque la manera de proporcionarle de manera fácil aquello que lo altera, ayúdalo a buscar un objeto que siente perdido y luego puede distraerlo con otra actividad.
  • Descubra dónde puede esconder sus cosas que en determinado momento considera pérdidas y sobre todo no discuta con él/ella.
  • Todos los familiares y personas asiduas al hogar deben estar enterados que si los acusa o tiene sospechas sobre ellos son consecuencia de la enfermedad.
  • Es importante hacerle ver de manera sencilla, sin discutir  que los demás miembros de la familia no observan ni escuchan lo que él ve.
  • La habitación de la persona con demencia debe estar iluminada para evitar sombras.
  • Llevar a cabo ejercicios con regularidad para disminuir la ansiedad.
  • Ofrecer un lugar seguro y despejado para realizar caminatas y ofrecer actividades repetitivas para ejecutar.
  • Mantener las puertas (colocar dispositivos de aviso cuando la puerta se abra) y ventanas (con dispositivos de seguridad) hacia el exterior cerradas Tenga las  puertas que  colocar las llaves en un lugar seguro donde la persona no tenga acceso.
  • Comunicarles a los vecinos que avisen a los familiares si observan a la persona con demencia sólo en la calle.  
     

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