Falta de confianza e inseguridad emocional

Dudar de nosotros y de todo en la vida, nos ocasiona muchos impedimentos, la falta de confianza e inseguridad emocional no nos permiten una realización personal. Esta inseguridad puede ser que esté con nosotros desde hace mucho tiempo, quizás a causa de una infancia infeliz, llena de ausencia de seguridad y protección, incluso puede deberse a una sobreprotección.  

La falta de confianza e inseguridad emocional es un enemigo que daña nuestra autoestima. Si permitimos que nos domine, esta inseguridad se apodera de nosotros deteriorando nuestra voluntad. 

Inseguridad emocional 

Esta surge de una duda continúa hacia nosotros mismos, hacia nuestros sentimientos, nuestras capacidades y forma de actuar. Muchas veces se espera que otras personas nos den validación, estar en este estado nos puede paralizar.

No se debe olvidar, que la vida en sí es una gran incertidumbre, y llena de inseguridades. El problema se presenta porque no somos conscientes de esto. Debemos estar preparados y entender que todo en la vida puede tener cambios en cuestión de minutos. No se debe tomar la inseguridad como una constante de nuestra vida.

Debemos saber manejar nuestra falta de confianza e inseguridad emocional, su aparición puede ser pronta, y lo más sano es saberla enfrentar. Esto no quiere decir que es mejor vivir con falta de confianza, sí o recordar que existe y así evitamos vivir en un mundo de ilusión.

La falta de confianza e inseguridad emocional excesiva no perjudica, esta puede dominar cualquier aspecto de nuestra vida.  Es importante saber diferenciar entre la inseguridad emocional y la inseguridad en general, un factor interno mucho más específico que está relacionado con nosotros y cómo nos valoramos. Es importante resaltar, debemos saber confiar en nosotros mismos sin esperar que otros nos indiquen como hacer las cosas o que debemos hacer.

Características de la persona con falta de confianza

Para comprender mejor la falta de confianza e inseguridad emocional cuando nos ataca, señalaremos las características más comunes que presenta una persona:

• Baja autoestima
• Necesidad de mostrar sus logros y recibir elogios.
• Están a la defensiva.
• Falsa modestia frecuente.
• Temor a los juicios, críticas y valoración de otros.
• Competitividad y perfeccionismo.
• Desconfianza grande hacia sí mismos.
• Querer contagiar de inseguridad y dudas a otros.

El pensamiento condicionado suele ser el patrón de actuación de la persona insegura, una guerra constante interior, tiene gran necesidad de demostrar y destacarse ante los demás como válidos, teniendo un marcado sentimiento de incapacidad e invalidez. Este tipo de personas no se sienten nadie si los demás no lo valoran, es decir, sienten que son invisibles.

Un psicoanalista propuso un concepto más amplio de la inseguridad. Pues bien, este afirmaba que las personas inseguras, mantenían una guerra por sentir superioridad, llegando a ser en extremo negativa en su vida, en especial en sus relaciones, estas personas pueden llegar a sentir placer por hacer infelices a otros. Así mismo, define este comportamiento como un tipo de neurosis.

Consejos para gestionar la falta de confianza

Es importante reconocer el esfuerzo que debemos hacer y que es nuestro, si tenemos la tendencia a subestimarse, el proceso llevará un largo tiempo. Si es posible erradicar la duda frecuente hacia nosotros y eliminar la inseguridad negativa en nuestra vida.

Creyendo en nosotros, formamos un pilar fundamental y de fuerza, que nos permitirá evitar dejarnos invadir por el malestar y evitar caernos. Eso sí, esto requiere de un trabajo constante y diario. Debemos tomar en cuenta ciertos aspectos: 

• Desarrollar el sentido del humor.
• Evitar comparaciones.
• No tomar las críticas como algo personal.
• Aceptar nuestras fortalezas debilidades.
• Cuidar nuestra conversación interna.
• Valorar todos y cada uno de los éxitos y avances.
• No buscar aprobación de los demás.
• Sanar heridas del pasado.
• No creerse perfectos.

El regalo más hermoso que podemos otorgarnos es confiar en nuestra capacidad y en nosotros para lograr un crecimiento personal.