Estrés transcultural

El estrés cultural puede variar en su intensidad y cuanto más diferente o ajena sea la sociedad a lo que era nuestra cultura o donde solíamos vivir, aún mayor va a ser el propio compromiso en la vida social, y, por lo tanto, mayor el estrés transcultural. Puede afectar mucho más a aquellas personas que están intentando instalarse o establecerse en un país o comunidad para hacer de ella a su nuevo hogar, de por vida o a largo plazo. 

El estrés transcultural viene a través de cambios de geografía, idioma, condición social, economía, condiciones políticas, religiosas, etc. Este choque cultural o estrés transcultural puede producirse de acuerdo a las expectativas que la persona tenga previo al viaje o al cambio, y a aspectos de su propia seguridad, la facilidad adaptación, manejo emocional o redes de apoyo. El estrés transcultural puede incrementar de acuerdo al nivel de compromiso psicológico dentro de la cultura. Este compromiso se refiere a las relaciones sociales, las responsabilidades o la recreación. Así mismo el compromiso con una comunidad extranjera aumenta el estrés, ya que es más difícil relacionarse con amigos de otra cultura, debido a temores o inseguridades a mal entendido o mal interpretado, por lo cual crea un impedimento para poder abrirse socialmente. 

Existe un componente importante cuando la baja autoestima y la falsa culpa aparecen en el migrante, debido al estrés transcultural que está experimentando puede generar en él mecanismos de defensa conscientes o inconscientemente hacia las personas de la otra cultura como, por ejemplo; retraimiento, depresión, relaciones interpersonales bajo tensión, comportamiento hostil, resentimientos, entre otros.

Para evitar el estrés transcultural es importante una preparación mental y emocional antes de la salida, ya sea seis meses o un año antes, ya que hay muchos aspectos personales y psicológicos que pueden influir en la facilidad o dificultad de adaptación de la persona. Asimismo, en el durante la llegada a una nueva comunidad o país. 

Si consideras que te sientes identificado con algunos de estos aspectos o que aún experimenta secuelas de un estrés transcultural, es importante la ayuda de un profesional de la Salud Mental.