Algunos hábitos comportamentales que nos ayudan a tener una mejor salud

La salud no es simplemente la ausencia de enfermedad, es un estado completo de bienestar físico, mental y social. Para poder llegar a este estado es importante conocer la existencia de comportamientos que influyen y generan consecuencias físicas y fisiológicas de manera inmediata, a mediano y largo plazo, las cuales, repercuten en nuestro bienestar físico y en nuestra longevidad. Estos comportamientos son conocidos como hábitos de vida saludables. Diversas investigaciones científicas han revelado cuáles son los hábitos que generan un impacto beneficioso en nuestra salud, en este artículo te mencionaremos y explicaremos algunos.

1. Realizar ejercicio físico: realizar este tipo de actividades de manera regular ayuda a la prevención de alteraciones físicas y psicológicas. La actividad física genera un impacto positivo en la salud de las personas ayudando a prevenir enfermedades tales como: alteraciones cardiovasculares, enfermedades coronarias, estrés, contribuye a la estabilidad emocional, reduce la ansiedad, la depresión y ayuda a la mejora del autoconcepto.
2. Tener una nutrición adecuada: muchas de las enfermedades actuales se relacionan con el tipo de alimentación que se tiene, las dietas saludables ayudan a disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades relacionadas con la nutrición. Varias de las enfermedades cardiovasculares y el cáncer, se deben en gran parte a comportamientos nutricionales inadecuados; por eso, es importante poder consumir alimentos que aporten nutrientes que ayuden al buen funcionamiento del organismo tales como: verduras, frutas, y alimentos con alto contenido en fibra; así como, evitar el consumo de grasas animales, azúcares y harinas refinadas.
3. Desarrollo de un estilo de vida que disminuya las emociones desagradables (negativas): las emociones negativas influyen de diversas formas en nuestra salud teniendo como principal exponente el estrés. La manifestación crónica de estrés aumenta la vulnerabilidad de la persona ayudando a que pueda padecer cualquier tipo de enfermedad, y su vez, al mantenimiento de manera indirecta de hábitos de vida no saludables tales como el consumo de drogas, sexo no seguro, evasión de comportamientos de seguridad, entre otros. 

Es importante recordar que: las conductas saludables se establecen a tempranas edades y son influenciadas por factores como la familia, la escuela, los amigos y los medios sociales. Estas conductas pueden modificarse y son más fáciles de adquirirse en periodos ventanas (adolescencia, embarazo, al momento de recibir un diagnóstico, etcétera). Aunado a esto, la motivación juega un papel importante en la adquisición de estos comportamientos y se ha demostrado en investigaciones que el adquirir y enseñar estos tipos de comportamientos es menos onerosos que tratar una enfermedad. Para mayor consulta sobre esta información siempre puedes preguntar a tu psicólogo o médico de cabecera.