10 señales que alertan de una adicción a los videojuegos

Para muchas familias el problema de la adicción a los videojuegos de sus hijos se ha convertido en una situación estresante que debe ser identificada y atacada de manera inmediata.   

Los niños adoran los videojuegos, ya que estos le proporcionan un elevado nivel de diversión, pero los padres deben tener un control sobre este tipo de entretenimientos y determinar si sus hijos tienen un disfrute sano y normal o están ante la presencia de una adicción a los videojuegos. 

Es importante destacar que un porcentaje considerable de jugadores de videojuegos llegan a presentar problemas de adicción. Cuando el niño o la persona está jugando parece no ocurrir nada extraño; el problema se presenta cuando su hijo debe dejar de jugar para realizar una tarea escolar, dormir, comer, entre otras actividades y se niega hacerlo. La adicción puede llegar a representar una situación muy difícil a nivel familiar. 

Para asegurarse de que su hijo no presenta adicción a los juegos revise los siguientes síntomas que indican si existe la adicción o no a los videojuegos:

• Conducta inusual: Cuando un niño es adicto a los videojuegos generalmente, se preocupan por cumplir con un comportamiento apropiado para obtener o ganarse el beneficio de poder jugar con los videojuegos. En el caso que no consiga ganarse este privilegio puede presentar un comportamiento abrupto, este comportamiento además lo pueden presentar mientras están jugando videojuegos además, de observarse distraídos, irritables y muy indiferentes con su entorno. 
   
• Aislamiento de su entorno familiar y social: Una persona adicta a los videojuegos puede pasar largos periodos de tiempo frente a la pantalla jugando, desconociendo el horario de dormir, olvidando que debe comer, compartir o conversar con sus familiares y amigos. Su comportamiento es de aislamiento con el juego evidenciando que existe un problema con esta situación. 
   
• Ausencia de control: Si el niño no tiene la capacidad de tener un control de la cantidad de horas que juega o si no es capaz de tener un control sobre su comportamiento y estado emocional  cuando llega el momento de desconectarse del videojuego estamos en presencia de un caso de adicción. En algunos casos los niños pueden llegar a perder el control emocional en situaciones donde sus padres le colocan normas o reglas acerca del uso de los videojuegos, donde los niños pueden presentar episodios de rabia e ira. 
   
• Prácticas impulsivas: El niño puede llegar a gastar mucho dinero en la compra de videojuegos y accesorios o cualquier instrumento que tenga que ver con el juego, el dinero utilizado generalmente, es de sus ahorros o llegan a pedirlo a los padres de forma descontrolada.  Para ellos la cantidad de dinero no tiene importancia, solo el hecho de querer tener más videojuegos y accesorios para su equipo. 
   
• Pérdida de tiempo: Cuando una persona es adicta a los videojuegos pierde el control del tiempo. Este pudiera decirse a sí mismo que solo va jugar 20 minutos y levantarse de esta actividad después de 10 horas sin darse cuenta cuánto tiempo ha pasado o simplemente no le importa pues su prioridad es jugar. 
   
• Sensación de vivir en un mundo paralelo o imaginario: Estas personas con adicción a los videojuegos se introducen en un mundo de fantasía por mucho tiempo, lo que puede ocasionarles problemas para vivir la realidad.  Los videojuegos pueden llegar hacer que algunas personas evadan y no acepten la realidad de su entorno.

Generan consecuencias negativas en varios aspectos de la vida: Uno de los aspectos más importantes en este punto es que el niño/a puede crecer de manera distante de sus amigos y familiares, no querer llevar a cabo sus tareas y asignaciones escolares,  no querer estudiar, no querer salir de la casa ni de su habitación, aislarse completamente, llevar una vida sedentaria que podría afectar su salud tanto física como mental.

Esconder sentimientos incómodos o negativo: En algunos casos el niño/a puede llegar a utilizar los videojuegos como un escape emocional, tratando de evitar situaciones difíciles que ocurren en su núcleo familiar, con sus padres, hermanos, con esto ellos escapan de enfrentar estos problemas y su realidad que pueden llegar a incomodarlos de manera significativa. 

Presentan actitud defensiva y negación de lo que es obvio: El niño/a puede llegar a confrontar a otra persona que pueda intentar mostrarle su adicción, asumiendo una actitud defensiva, negando bajo cualquier circunstancia lo que es evidente, llegando a comportarse de manera agresiva y negativa ante la situación. 

No tienen administración del dinero: La adicción a los videojuegos puede hacer que la persona desembolse una gran cantidad de dinero en juegos nuevos, accesorios, dispositivos especiales de los cuales tienen la creencia no poder privarse. Si es un niño que no tiene los recursos económicos recurrirá a los padres de manera descontrolada a pedirles que se lo compren llegando a ponerse muy irritables si no consigue su cometido.