¿Tu pareja te está siendo infiel?

Por diversas razones uno de los miembros de la pareja puede llegar a ser infiel. Los especialistas señalan que este comportamiento basado en la traición no necesariamente depende de la personalidad, el carácter o las carencias que puedan existir en la relación. Sin embargo, el resultado es similar: molestias, insatisfacción, inseguridad y dificultad de cómo actuar después de cometer la infidelidad.

Parejas infieles

Se entiende por infidelidad a cualquier situación en la cual una persona, con una relación estable con su pareja, contacta intensamente a alguien que no es su usual compañero. En esta unión pueden existir o no relaciones sexuales, lo que permite diferenciar entre la infidelidad enfocada en las relaciones sexuales y otra donde existe solo el vínculo afectivo.

Para el primer caso, la insatisfacción sexual en la relación es la razón para iniciar nuevas relaciones, mientras que en el segundo escenario el motivo es una insatisfacción más compleja e íntegra que promueve el incumplimiento de los tratos de fidelidad establecidos por la pareja.

¿Por qué mi pareja me engaña?

Desde el área de la psicología se presentan las siguientes causas:
 

Tipos de apego

John Bowlby nos indica que según el tipo de apego con el que cada individuo se ha criado se pueden evidenciar las conductas basadas en la infidelidad.

Si se ha tenido un apego ansioso, el individuo es más temeroso al rechazo, con un perfil con poco o ningún control de sus impulsos, siendo un gran factor de riesgo al momento traicionar afectivamente a la pareja.

Si existe un apego desorganizado, encontraremos a mujeres y hombres incapaces relacionarse de manera auténtica con otro. Son emocionalmente inmaduros para construir un compromiso firme y seguro.

Amantes del riesgo

Hay individuos que tienen el sentido del riesgo muy pronunciado en su personalidad. La presencia en su organismo de altos niveles de dopamina hace que necesiten vivir situaciones intensas y emocionantes con las que se aumente el placer y la satisfacción. Ser infiel a su pareja, tener encuentros sexuales fuera de la relación, son escenarios fascinantes. 

Factores neurológicos

El doctor Sari van Anders, Ph.D. psicólogo clínico de la Universidad de Michigan ha realizado múltiples estudios de los niveles de testosterona tanto en hombres y mujeres, expresando que cuanto más alto es el nivel de esta hormona en cada persona, más grande es el deseo por conseguir un nuevo compañero sexual.  

Poder y nivel económico

El individuo con un perfil de más poder, presentan una mayor probabilidad de ser infiel. No solo porque tiene más oportunidades, sino porque hallan frecuentemente personas análogas, con los mismos gustos y condiciones sociales, psicológicos y motivacionales con las que puede experimentar nuevas emociones.

Deseo sexual

El deseo sexual es el motivo más frecuente para justificar la infidelidad. El libido y el deseo incontrolable definen esas situaciones donde la persona da el paso y consuma la infidelidad. Sin embargo, existen otras personas que están conscientes de la atracción sexual pero valoran tanto la relación con su pareja que no llegan a ser infieles.  

La infidelidad emocional

En la actualidad en un mundo cada vez más en línea y con un contacto virtual más frecuente, la infidelidad se basa exclusivamente en el componente emocional (sin contacto sexual). Sin embargo, se puede llegar a tener compañeros con altos niveles de intimidad, debido a la necesidad tener algo nuevo o simplemente para conseguir algo diferente que no tiene en su relación de pareja.

Infidelidad e insatisfacción personal

Para la mayoría de los casos, la infelicidad es fruto de una insatisfacción personal. Por lo general, la insatisfacción es el resultado de inseguridades, miedos e indecisiones, que hacen que la vida pase sin ningún incentivo ni sentido personal, ya que no existe una motivación para enfrentar, resolver y decidir frente a las condiciones que le hacen infeliz al individuo.

En otros casos, la insatisfacción crece dentro de la relación de pareja, porque no funciona o no se han tomado las decisiones adecuadas. Como resultado, la pareja tiende a tener una relación distante, monótona y fría, donde va aumentando la insatisfacción personal.

No obstante, la fidelidad es la base de para toda relación de pareja, por tal razón, cortar esa base, pone en riesgo la relación, ya que infidelidad produce desconfianza, un valor necesario para convivir en un lugar seguro como pareja.