Habla ahora con nuestro equipo, sin compromiso, y si te suscribes podrás hablar gratis 50 min. con tu psicólogo.
Permítenos ayudarte a afrontar de manera más positiva y eficaz los retos del día a día.
En procesos psicoterapéuticos a menudo el paciente se cuestiona si estará o no engañándose, lo que le lleva a cuestionar sus percepciones y decisiones. Cuestionarse a una misma es útil muchas veces; es un proceso a través del cual crecemos, nos permitimos ampliar nuestras miradas y cuestionar lo que creíamos hasta ese momento (que seguramente nos resultó útil) pero que quizás no resulta tan útil para este nuevo periodo de nuestra vida.
Sin embargo, hay otras ocasiones en las que cuestionar nuestras percepciones es contraproducente y nos puede llevar a la pérdida de nuestro propio poder personal. Cuestionarse a una misma puede llevar a la duda infinita y, en ocasiones, a valorar más la opinión de otras personas que la propia nuestra. Cuando esto se produce de manera sostenida nos puede abocar a un sentimiento de inseguridad constante, miedo y dudas.
La duda es sana cuando nos permite crecer; sin embargo, muchas veces se convierte en un obstáculo para nuestro crecimiento. ¿Cómo saber si me estoy engañando o estoy dudando de mi misma?
Esto es algo que tendrás que explorar por tu cuenta. En este sentido, te presento unos ejercicios para que puedas lograrlo:
Valido mi visión, mi percepción o decisión: aunque no lo vea del todo claro me repito a mi misma que yo me valido, que valido lo que he decidido. También puedo validar mi duda, darle espacio y permitir que esté (convivir con ella por un tiempo), decirme que yo estoy 100% conmigo. Puedes usar tu creatividad para encontrar la manera de validarte; el objetivo aquí es tirar hacia adelante con lo que hay (la duda constante nos mantiene estancadas). Si más adelante veo que me equivoqué o que otra opción es mejor -y entonces lo siento más seguro-, entonces redirijo mis acciones.
Observa si sueles dudar de ti misma: quizás esto es una señal de que necesitas tu propio apoyo y empezar a confiar en tus percepciones. Esto al principio puede resultar complejo, quizás te dirás: “¿cómo voy a apoyarme si no confío en mi misma?”. Sin embargo, es importante confiar, sobre todo en estos casos. Puedes escribir en un papel todas las veces que has dudado de ti durante la última semana, lo que te servirá para tener una idea más concreta de cómo te relacionas contigo misma.
Queremos ayudarte a conseguir una mejor versión de ti. Si nos aportas más información sobre tu situación podremos entender mejor qué la provoca:
Habla ahora con nuestro equipo, sin compromiso, y si te suscribes podrás hablar gratis 50 min. con tu psicólogo.
Permítenos ayudarte a afrontar de manera más positiva y eficaz los retos del día a día.
< Siguiente
¿Qué es la Psiconeuroinmunología clínica?Anterior >
Acoso cibernéticoSuscríbete a las Noticias de Psonríe
Puedes seleccionar que tipo de noticias quieres recibir