Trastornos del sueño provocados por la COVID-19

La pandemia y aislamiento social provocada por la covid ha sido un proceso muy  largo que ha cambiado todas nuestras rutinas, costumbres y manera de vivir. Todos estos cambios ocasionados por la emergencia sanitaria a nivel mundial han generado problemas de salud y para dormir a una gran cantidad de personas. 

La aparición del trastorno del sueño o insomnio ha sido un problema grave ocasionado por los altos niveles de estrés y ansiedad que ha generado en Covid-19 y su aislamiento, que se vio incrementada entre los meses de marzo y mayo del año 2020. 

El insomnio no es más que un trastorno del sueño muy común, donde la persona tiene problemas para conciliar el sueño,  dormirse  o ambos casos; todo esto lo llevará a dormir por muy poco tiempo, a tener sueños de muy baja calidad, a impedirle descansar, estar despierto durante la noche, sentir que no descansa y a despertarse demasiado temprano. 

El insomnio puede ser agudo, el cual se refiere a un periodo de muy corta duración o crónico cuando se extiende por largos periodos de tiempo.  Entre las causas habituales del insomnio se puede mencionar el estrés laboral, la presión familiar y los acontecimientos traumáticos. 

El insomnio agudo puede llegar a durar días a semanas y el crónico un mes o más. Por lo general el insomnio crónico es consecuencia de una patología, trastorno, problemas médicos, el consumo de ciertos medicamentos o trastornos del sueño. El consumo exagerado de alcohol, tabaco y cafeína también puede ocasionar insomnio. 

El insomnio afecta con mayor frecuencia a los hombres, a cualquier edad. En el caso del Covid-19 este ha sido una preocupación sobre todo para  los responsables y proveedores económicos de las familias. Estos han presentado mucho estrés por la incertidumbre de todos los problemas económicos que la pandemia ocasiona. El estrés, los problemas de dinero, el cambio de la dinámica familiar.

Todavía no se ha podido dimensionar la verdadera magnitud que la pandemia ha tenido a nivel mundial, en el caso de trastornos del sueño existen estudios que demuestran un aproximado de su alcance, en cuanto trastornos del sueño o afectación de este. 

Sin embargo, es fácil determinar que a corto plazo los problemas de insomnio pueden llegar afectar el rendimiento académico, laboral, de atención y del estado de ánimo de un gran número de personas en el mundo. Pero,  si los problemas de insomnio persisten en las personas pueden llegar a experimentar  una mayor inclinación a padecer problemas de salud mental y a nivel cardiovascular, neurológicos e incluso diabetes. 

Cada persona tiene una rutina de sueño que le sirve para recuperar energías y descansar, por lo general se recomienda dormir entre 7 y 9 horas, pero repito esta es una característica muy individual de cada persona. 

Lo importante es que la persona asuma el control de sus emociones y se ayude aplicando ciertos protocolos que favorecerá a la hora de conciliar el sueño y dormir adecuadamente para descansar.  Para ello es muy importante eliminar todos aquellos factores que provocan estrés y relajar el cuerpo con algunos ejercicios, esto prepara el cuerpo para dormir.  La cena debe ser una comida ligera y temprana, llevar a cabo actividades que sean tranquilas y pacíficas en horas de la tarde. Evitar el uso de celulares, tablets, computadoras y no revisar noticias que puedan alterar su estado de ansiedad y estrés.  

Por último, es importante utilizar ropa cómoda y tener una habitación ordenada, limpia y acorde para tener un  sueño placentero.