Habla ahora con nuestro equipo, sin compromiso, y si te suscribes podrás hablar gratis 50 min. con tu psicólogo.
Permítenos ayudarte a afrontar de manera más positiva y eficaz los retos del día a día.
¿Cuántas veces has dudado? ¿Cuántas veces la duda te ha paralizado y ha impedido que empieces? ¿Cuántas veces has dejado de intentarlo?
Existen épocas donde la duda está más presente. Una duda acompañada del miedo que invade tu cuerpo cuando una puerta se abre delante de ti. Aquel miedo que aparece cuando lo que observas es sólo novedad. Cuando nada de lo que ves se parece a lo que has vivido hasta el momento. Cuando debes enfrentarte solo.
Aunque estas dudas e inseguridades parecer ser del tamaño de cientos de monstruos acechando tu sueño, debes confiar en ti y en tus posibilidades. No permitas que te bloqueen. Ponlas de tu parte y utilízalas a tu favor. Confía, sonríe, aprieta la mandíbula y ten el valor de dar un paso adelante. Ten en cuenta que siempre que lo necesites y lo creas conveniente puedes retroceder. Nada ni nadie te obliga a seguir los mismos pasos de quien pasó por delante. Dale una oportunidad a esa puerta, pero no te quedes dentro si no te convence.
Recuerda, si el momento vital por el que estas pasando parece limitarte, puedes pedir ayuda a alguien que te acompañe. Pedir ayuda ha sido siempre beneficioso.
Queremos ayudarte a conseguir una mejor versión de ti. Si nos aportas más información sobre tu situación podremos entender mejor qué la provoca:
Habla ahora con nuestro equipo, sin compromiso, y si te suscribes podrás hablar gratis 50 min. con tu psicólogo.
Permítenos ayudarte a afrontar de manera más positiva y eficaz los retos del día a día.
< Siguiente
El efecto PigmaliónAnterior >
Aprender a decir noSuscríbete a las Noticias de Psonríe
Puedes seleccionar que tipo de noticias quieres recibir