Cosas que quizás no sabías de la depresión

La depresión puede ocasionar un gran número de síntomas que dejan tristeza, angustia, desolación sobre qué decisión tomar en la vida. Generalmente la depresión se estimula y apoya en varios aspectos para desarrollarse y consolidarse en las personas, cuando alguien comienza a sentirse decaído no lo afectan solo los síntomas característicos, también tienen que lidiar con la inquietud que genera saber el diagnóstico. 

La persona que recibe este tipo de diagnóstico o no, se sienten de igual manera atemorizados por sus comportamientos, conductas y reacciones. Aunque la realidad es que la depresión no es una enfermedad y es curable completamente. Lo más importante es que la persona que lo padece quiera salir de esta situación y comprometerse con el proceso por el tiempo que sea necesario. 

Es una práctica muy común para estos casos combinar la terapia psicológica con fármacos, sin embargo, la terapia por sí sola es el mecanismo más poderoso para lograr una estabilidad emocional y evitar los sentimientos de desesperanza, apatía y tristeza. Desde el punto de vista psicológico, se ha comprobado experimentalmente que la terapia funciona para tratar la depresión.  Por esta razón, las personas que pasan por este tipo de procesos pueden tener la certeza primero de que no están solos en esto y que pueden salir de este huracán de sentimientos negativos y que el psicólogo está en la condición de ayudarlos. 

Cuando una persona está deprimida lo primero que hace es abandonar sus actividades cotidianas. Todo aquello que le gustaba hacer ya dejan de importarle y las dejan de lado y con esto pierden la motivación y las fuentes de emociones positivas.  Si no existe motivación o un deseo la iniciativa se apaga y la voluntad se pone a prueba, dejando a la persona sin fuerza  y sin ganas. La persona deprimida se da cuenta de que sus pensamientos cambian a ser más negativos, llenos de desesperanza, tristes y duros, llenando su conversación con diálogos muy dañinos para sí mismos. 

Si estas personas no acuden a terapia, no son capaces de percatarse de que esos pensamientos los inundan, por ende no podrá quitarle ese poder o fuerza y descomponerlos. Este proceso solo es posible con ayuda pues no tienen la capacidad de hacerlo solos, necesitan ayuda especializada. Aunque parece que nuestra cabeza tiene razón en lo que pensamos, no hay que creerlo todo, es importante mantener muchos pensamientos a raya, hasta recibir la ayuda adecuada. Sin embargo, muchas veces estos pensamientos negativos no se pueden evitar, para ello se debe contar con herramientas para saber ignorarlos. En el tratamiento para la depresión es muy importante contar con apoyo familiar y de amistades, en algunos casos cuando la persona está deprimida se reduce considerablemente su círculo social y de apoyo, como consecuencia de los síntomas de la depresión.  

Por otra parte, al principio muchas personas intentan ayudar y al no obtener o percibir resultados positivos terminan alejándose, por impotencia o no tener idea de cómo ayudar o porque ya no se sienten a gusto con esa persona. Por ello es de vital importancia que la ayuda venga de parte de un profesional calificado. Aunque existen casos en los que las personas logran salir por sí solas de procesos depresivos, hay otras que conviven con ella por muchísimos años o toda su vida. Sin embargo, esto no significa que no pueda ser tratada con un especialista en la materia en cualquier momento. 

Pensar que la depresión que se padece no necesita de terapia, no servirá de nada y no es una opción correcta. Más bien, trabajar a tiempo impide que este avance y tenga consecuencias irreversibles en la vida. Si los medios personales de una persona le permiten asistir a terapia, este sería el paso más importante para salir de un proceso de depresión y orientarse al éxito de este proceso, recuperando el control de los pensamientos y el bienestar.