Antilíder: definición y características

¿Qué es antilíder?

El antilíder es la persona que se cree un líder, pero realmente se le reconoce solo por miedo o por conveniencia de lo que pudiese pasar si no se le reconoce como tal. El antilíder es esa persona, que tal vez por tener mayor rango, se cree líder y trata a sus compañeros como subordinados, suele dar órdenes todo el tiempo, y de no cumplirlas amenaza con sancionarlos.

El antilíder puede lograr su autoridad, solo por lograr un puesto más alto en una organización, y tal vez obtiene ese puesto sin méritos propios. La autoridad informal que ofrece la influencia de una persona, queda alejada de los antilíderes. El antilíder es esa persona, que es capaz de hacer cualquier cosa, con tal de preservar su liderazgo.

La persona que ejerce el poder de antilíder, siempre busca el beneficio propio, no poseen una personalidad solidaria ni sincera, pues hoy considera a una persona su enemigo, y mañana, si le es conveniente, puede tratarlo como su mejor amigo, todo esto lo hace para conservar el poder que le han otorgado. El antilíder, por lo general, es capaz de faltarle el respeto a otros porque cree que de esta forma demuestra su poder y autoridad.

Características de un antilíder

• La persona antilíder no logra conectarse de buena manera con su equipo de trabajo y por tal motivo no logra llegar a ningún objetivo importante ni consigue la cohesión en sí mismo. Hablaremos de las características que presenta un antilíder.
• Es un excesivo competidor, es de esas personas que no permitirá que nadie más brille, por lo tanto, no aceptará jamás que nadie sepa más que él, incluso, se otorgará a sí mismo los méritos de otras personas, con falta de cordura y con total egoísmo.
• No realiza trabajo en equipo, un antilíder siempre esperará que el equipo siempre trabaja por él, este siente que los demás deben trabajar y el tomar el mérito de los logros obtenidos para elevarse, esto ocurre porque el antilíder es soberbio, no sabe de vivir con humildad.
• Actúa sin aprobación, no le interesa la opinión de los demás, por este motivo, ejecuta acciones sin consultar, siempre con la firme convicción de que lo que él hace será lo mejor de lo mejor en todo momento y en toda ocasión. Generalmente, incómoda al equipo y lo hace por placer, buscan siempre imponer su autoridad.
• Abusa del poder, esta resalta siempre en la persona antilíder, le gusta abusar del poder, lo que quiere decir, que estará buscando siempre estar por encimas de otras personas para lograr sus objetivos y metas, así tenga que hacer lo que tenga que hacer, incluso explotar a su equipo de trabajo con la fuerza de su autoridad.
• Un antilíder no se percata, que su autoridad está otorgada por una posición que ejerce dentro de una empresa, pero que no está legitimada por sus buenas acciones ni por la forma de comportarse con otros compañeros. Este se caracteriza por mostrar un comportamiento soberbio, se cree en posesión de la verdad, no escucha consejos, no reconoce sus limitaciones y tampoco sus errores. 

Todos estos aspectos y características del antilíder lo llevan a cometer errores graves, que podrían poner en peligro el bienestar de una organización, aparte de ocasionar un gran rechazo por los empleados de la misma. Este es incumplidor, ofrece recompensas a sus colaboradores que nunca llegan a sus manos. Así pierde todo tipo de credibilidad, y sus colaboradores no están dispuestos a hacer ningún esfuerzo extra.

El antilíder es temeroso, siempre se sentirá inseguro de perder su poder, como siente miedo, se rodea de personas que considera mediocres en vez de rodearse de profesionales con talento. En general, no tiene principios éticos ni sólidos que lo representen, es deshonesto, por este motivo, no se hará raro que cometa injusticias y provoque que su equipo de trabajo sea desconfiado y no le apoye.

El antilíder es sumamente autoritario, y esta característica podría serle de utilidad para obtener resultados a corto plazo, pero esta situación puede dañar a la empresa, pues los empleados bajo supervisión del antilíder preferirán buscar empleo en otra empresa, donde no reine un clima laboral tenso y con tiranía.

De este modo, se puede dejar por sentada las características de un antilíder, quedando claro que es una persona, egoísta, déspota, que nunca piensa en el bienestar de los demás y que solo piensa en sus propios intereses y en cómo obtener lo que desea mediante la explotación, el maltrato y manipulación de otras personas.