Ansiedad: síntomas, manifestaciones y soluciones

¿Quién no ha sentido ansiedad en algún momento de su vida? La ansiedad puede considerarse una emoción normal en el ser humano y representa un alerta para quien la siente. Pero si es exagerada o continua en un periodo prolongado de tiempo puede afectar el funcionamiento del individuo. En la actualidad la ansiedad es uno de los motivos más frecuentes de consulta psicológica, además de ser un trastorno muy común.

Entre los síntomas de la ansiedad se encuentran: tensión, preocupaciones excesivas, insomnio, palpitaciones, incomodidad en grupos sociales, temor, deseos de huir sin razón aparente… A veces viene disfrazada de síntomas físicos como hipertensión, fatiga, cefalea, dolores abdominales… La ansiedad es una reacción emocional desadaptada.

Existen diferentes tipos o modalidades de trastornos de ansiedad; entre los más comunes tenemos:

• Ansiedad Generalizada: preocupación exagerada ante los sucesos del día a día, anticipando lo peor, con una duración de seis meses o más.
   
• Fobias: miedos extremos, irracionales e incapacitantes frente a situaciones que no representan un peligro real, pero pueden causar limitaciones severas.
   
• Pánico: sentimientos repentinos de terror, puede acompañarse de dolor en el pecho, palpitaciones, mareos.
   
• Trastornos post-traumáticos: pesadillas, aparición repentina de recuerdos dolorosos. Ocurren después de un evento traumático.

Reconocer que la ansiedad forma parte de la vida real puede ser el primer paso para superarla. Es importante tomar conciencia del tipo y grado de ansiedad que podamos sentir e identificar sus posibles causas. Cuando los síntomas llegan a ser crónicos, pueden agregarse otros trastornos como depresión, trastornos alimenticios y abuso de alcohol, entre otros y afectarse las áreas familiar, académica, laboral y/o social, reduciendo el rendimiento del individuo y su calidad de vida.

Reconocer la presencia de ansiedad es importante para accionar soluciones que promuevan un mayor bienestar psicológico. Favorece mucho los ejercicios físicos, la música y técnicas de respiración y relajación. En caso de ansiedad severa o crónica es necesaria la ayuda profesional para un diagnóstico y tratamiento adecuado.