Las pérdidas y el duelo

Como seres humanos estamos presentando perdidas constantemente, estas pueden ser esperadas y estamos preparados para enfrentarlas, y otras como las perdidas repentinas las cuales nos llegan de un momento a otro y no hemos tenido el tiempo de prepararnos experimentando así diferentes emociones, por lo que el duelo es más doloroso y difícil de llevar, pero no quiere decir que no se pueda superar al lado de un profesional que nos guíe en cuanto a las herramientas necearías para sobrellevar lo vivido. 

En las perdidas encontramos dos clases: 

Pérdida de personas

• Pérdida física: donde experimentamos la muerte de un ser querido (pareja, hijos, padres, familiares, amigos, vecinos, conocidos, animales)
• Pérdida emocional: separación física y emocional de un ser querido como lo es el divorcio, o separación de amigos y familiares.

Pérdida de situaciones o cosas

• Perdida de un empleo (jubilación, desempleo)
• Salida de los hijos en el hogar (nido vacío)
• Cambios en el esquema corporal
• Perdida de estatus
• Pérdida de dinero (quiebra)
• Cambio de lugar de residencia (emigración, cambio de vivienda sin consentimiento personal)
• Perdida de salud

A todas estas pérdidas es necesario hacerle un duelo, el cual es un proceso por el que pasamos todos los seres humanos al experimentar una perdida, claro está que en ocasiones no nos damos cuenta de lo vivido pues, lo hacemos automáticamente sin generar malestar, pero cuando se presenta malestar emocional necesitamos ser conscientes de lo vivido y realizar el proceso, proceso que nos lleva a una restructuración de nuestros pensamientos, adaptándonos a la nueva realidad que genera ese cambio pasando por diferentes etapas como, negación, ira, tristeza para llegar a la aceptación y aprendizaje, en algunos momentos este proceso lo hacemos sin ningún inconveniente, pero cuando no logramos avanzar es necesario pedir ayuda, pues hay cosas que no vemos que un profesional nos puede ayudar a ver, entender y avanzar.