Los vómitos son una desagradable experiencia por la que se puede pasar, además, que el vómito puede estar conectado a otros dolores y molestias. También se le puede considerar como un acto que nuestro organismo hace de forma natural ya que debe expulsar agentes que le causan malestar. De esta forma el vómito no se ve relacionado con alguna enfermedad o alguna patología. 

Existen personas que sienten un intenso y absoluto temor a todo lo que tiene que ver con el vómito. Esto se le conoce como emetofobia, una fobia de la cual hablaremos. 
 

¿Qué es emetofobia? 
 

Es una afección psicológica, incluida entre los trastornos de una ansiedad específica. Como muchas otras fobias, se diferencia porque la persona experimenta un profundo temor hacia una persona, situación específica u algún objeto. 

Este temor exagerado se presenta, que se muestra ante muchos estímulos que van relacionados con el vómito. Aun así, muchas otras personas pueden manifestar aversión hacia el vómito, en la homofobia la persona que la padece, sufre una sensación de temor, la cual le parece incontrolable, irracional y que perdura por un tiempo. 

Las experiencias que puede ocasionar una respuesta de ansiedad va desde la acción de vomitar, propio o ocasionado de ver a un tercero vomitar, así como una sensación nauseabunda que se presenta al vomitar. 

Según estudios realizados, se calcula que en un 5% aproximadamente de la poblacion puede llegar a padeecer miedo al vomitar, y el patron de comportamiento en personas de diferente condicion, sexo y edad. Registrándose casos en niños, adolescentes y adultos. 

La mayoría de las personas comparten algunas de las características de la emofobia, entre estas características se incluyen personalidad ansiosa y que pueden aumentar su nerviosismo y de tensión, cuando se encuentran en sitios donde hay personas enfermas, como los centros de salud, considerando que este centro encontrará personas vomitando. 

Algunas personas, suelen modificar sus hábitos alimenticios, solo consumen alimentos de los cuales estan seguros no vomitaran. Pueden verse casos donde esta conducta llega a ser grave, tan grave que puede aparecer trastorno alimenticio conocido como anorexia.  

                                                                                                                                                                                                                                                 
La persona restringe la cantidad de ingesta de alimentos diaria o simplemente no come, tratando de evitar vomitar. Este hecho junto con la sensación de ansiedad causan la emetofobia, lo que se convierte en un sufrimiento continuo y en un tormento. 

 

¿Cuáles síntomas presenta el miedo a vomitar? 
 

La emetofobia se encuentra entre los trastornos de ansiedad específicos y de las fobias, su condición de cuadro clínico se observa de una manera similar a otras fobias. Los síntomas que se aprecian en este diagnóstico se dividen en sintomatología conductual y sintomatología física. 


Los síntomas, pueden aparecer por la presencia de la fobia o como por libre imaginación. Esto trae como consecuencia los siguientes síntomas que detallaremos según su categoría: 

1. Síntomas cognitivos 
La emetofobia se caracteriza por la aparición de una gran cantidad de síntomas cognitivos, entre ellos se incluyen creencias, pensamientos e imaginación de los posibles peligros que el acto de vomitar pueden ocasionar. 

La presencia de estas creencias o ideas, se demuestran de una forma incontrolable, incontrolable e irracional. Si se le incluye otros pensamientos de índole catastrófica, llenarán el cerebro de las personas con ideas que suman a su fobia. 

2. Síntomas conductuales 
Los síntomas del efecto cognitivo, se reflejan en la presencia de los síntomas conductuales. La sintomatología que está relacionada con el comportamiento de la persona, demostrada por conductas de escape y de evitación. 

Estas conductas de evitación, son los comportamientos que se llevan a cabo con la finalidad de eliminar el efecto fóbico. Los individuos podrán manifestar su negativa para comer, comen alimentos seleccionados, comen de forma pausada y lenta o bien no desear asistir a algún sitio relacionado al vómito. 


Las conductas de escape, aparece en cuanto la persona evite encontrarse con una situación relacionada al vómito, por lo que se refugiara en algún tipo de conducta que le facilite escapar de la molestia. 

3. Síntomas físicos 
Con la aparición de los síntomas fobias, es decir cualquier síntoma relacionado al vómito, aparece una hiperactivación del sistema nervioso. Está relacionado al aumento de la funcionalidad apareciendo cambios en el organismo y todo tipo de alteraciones. 

Entre los síntomas físicos se incluyen:  

. Cefaleas 
. Aumento de la tasa respiratoria. 
. Sensación de mareo y vértigos. 
. Elevación de la tasa cardíaca. 
. Náuseas y/o vómitos. 
. Aumento de la tensión muscular. 
. Aumento de la sudoración. 
. Sensación de ahogo, asfixia o falta de aire. 
. Pérdida del conocimiento o desmayos. 
. Alteraciones gástricas y dolores estomacales. 

 

¿Cuáles son las causas? 
 

Tratar de encontrar el origen real de una fobia es un asunto que resulta complicado, en el caso específico de la emetofobia, muchos pacientes hacen mención a la vivencia de cosas dramáticas o desagradables donde estaba presente el acto de vomitar o el vómito.  

Son muchos los casos existentes donde la persona no tiene la capacidad de asociar el temor con ninguna experiencia traumática, por lo que se toma en consideración que existen algunos factores en la aparición de una fobia, puede ser aprendizaje por imitación o predisposición genética. 
 

¿Existe un tratamiento? 
 

Hay casos donde la fobia resulta muy molesta incluso peligrosa, el paciente puede necesitar una intervención psicológica, para ayudar al paciente a controlar y disminuir la intensidad de los síntomas que le ocasiona la fobia, hasta llegar a lograr que desaparezcan por completo. 

Existen muchas terapias psicológicas y una cantidad de intervenciones que cuando son supervisadas por un psicólogo, dan resultados muy efectivos al paciente. La terapia cognitiva-conductual es la más recomendada, por obtener unos resultados rápidos y eficientes. 

Estas terapias pueden incluir tres tipos de modalidades complementarias y diferentes. Por un lado se encuentra la ¨reestructuracion cognitiva¨, donde la persona logra modificar sus creencias distorsionadas al igual que sus pensamientos. 

También se proporcionan técnicas de desensibilización sistemática o técnica de exposición, donde los pacientes se enfrentan en vivo, de forma gradual, a una estimulación fóbico, ya sea de forma directa o empleando su imaginación. 

Y por último, esto viene acompañado de un entrenamiento de relajación que le brindara unos niveles de excitación al sistema nervioso, que beneficia a la persona al enfrentar una situación de temor.